miércoles, diciembre 04, 2013

60 días

Hace tiempo que no me metía a escribir cosas... Supongo que estoy más corta de tiempo, y también más dejada.
Han pasado muchas cosas desde la última vez que me digné a narrar cosas relacionadas a mi vida, y que no tienen que ver ni con doramas ni con alegatos y descargos en contra de la gente.
El día 22 de noviembre recibí mi título de Químico Farmacéutico. Por fin cerré mi etapa de pregrado, así que no me queda más remedio que enfrentar la adultez que se me viene encima y que he tratado de evadir durante algunos años, jajajajá.
Por otra parte, ese mismo día me encontré con seres basura de mi pasado. Lo más gracioso es que no me sentí mal por ver sus caras de desagrado hacia mí ni tampoco me importó su presencia. Igual me gusta hinchar las pelotas y referirme mal hacia ellos (es como parte de uno de mis rituales de liberación, no hay que olvidar la costumbre xD), pero son parte del pasado y después de la ceremonia ahora sí que no los veré más en la vida y me alegro de sobremanera por eso.
Otra cosa relevante, es que tengo que preparar mi examen de calificación porque la primera vez que lo di, pese a que me aprobaron el proyecto, guateé un poco en la parte teórica así que me salió vale otro en la presentación, pero no es tan grave como se lee. Igual me molesté mucho con mis tutores por retarme, siendo que la culpa es compartida porque ambos me dejaron de lado. Al menos lo manifesté y dejé bien en claro, además que apenas salí de eso comencé a estudiar nuevamente. 




lunes, julio 08, 2013

cabraculiá*

Así nomás.
Me siento un poco colapsada así que necesitaba sacar algo de mi cabeza para tener espacio y enfocarme en lo realmente importante en estos momentos.
Hace unos días pregunté por facebook qué era mejor, si tirar 14 años por la borda o simplemente ignorar...
Por más que me aconsejaron, aún me siento incómoda. No sé si se debe a la falta de reacción visceral o simplemente a que no he hecho un movimiento para finiquitar esta situación y sacarme la espina que tengo atravesada. Sigo pensando si vale la pena mandar a la cresta una amistad que ha perdurado por 14 años o me hago la lesa. La idea da vueltas por mi cabeza y por más que tomo "decisiones" no quedo conforme. Siento que no estoy haciendo las cosas como usualmente lo tiendo a hacer y por eso mismo es que le he dado tantas vueltas al asunto.
A ti,
Te he dicho muchas veces todo lo que pienso, de forma sutil (considerando mi manera de ser) pero no hay caso. Sigues estancada en la misma cosa y al parecer lo disfrutas porque no haces nada para salir de ahí. Yo no sé si es por comodidad, cobardía, temor, etc. Somos dos seres completamente diferentes y por ende nuestros pensamientos no tienen que coincidir. Pero no comprendo, te lo juro, ese afán de estar PEGADA con algo que ocurrió hace tanto tiempo. ¿Qué estás esperando para continuar con tu camino? La otra persona no va a volver a ti a perdirte perdón y en realidad eso no estaría cambiando las cosas. Simplemente decidió tomar otro rumbo y no saber más de ti. Te lo digo porque yo viví algo similar, pero en vez de dejarme arrastrar por la decepción decidí que era mejor seguir con la vida y aventurarme en cosas nuevas. ¿Hasta cuándo vas a seguir así? No sabía que ser miserable era tan bacán... Me cansé de siempre quedar como la mala de la película porque por esta vez estoy completamente segura que yo no soy la del problema. No me pidas soluciones porque no escuchas, no me pidas apoyo porque te lo pasas por la raja. 
Me aburrí de desgastarme por nada. Ni yo tengo tantos atados (considerando mi naturaleza conflictiva)...

martes, julio 02, 2013

Sequedad mental-Random nº... no me acuerdo

Hace tiempo que no me metía a desahogarme aquí.
Han pasado muchas cosas desde la última vez que se me ocurrió escribir alguna cosa que hablara sobre lo que me ha sucedido en este tiempo.
He visto muchas teleseries koreanas, películas, comprado discos, e incluso fui a un concierto de k-pop. Supuestamente lo odiaba con mi alma, pero al final resultó ser amor xD
He salido mucho, muchos carretes. Lo he pasado chancho, no me puedo quejar. He tenido sus atracones locos con seres de por ahí y flirteos varios. Aunque no siempre las cosas resultan como uno espera. Me pasó con el hermano de una compañera de colegio. Ella es la raja y nos llevamos ídem... Un día se le ocurrió que yo carreteara con ella y su hermano mayor al que una vez cuando pendeja le hice una tarjeta de cumpleaños a pito de nada. Fui y finalmente me encontré con aquel misterioso ser. Aunque la velada estuvo entretenida, no sentí ni una pizca de química o interés por él. Pasaron los días y empezó a mandarme mensajes de texto a mi celular. Yo le respondí, pero nunca le di una chance como para que se pasara el rollo y las cosas se fueran por el tranque (para él). Me llamó y me invitó al cine, a tomar algo... Y siempre lo declinaba porque tenía otras cosas que hacer. Hasta que en un momento se volvió inevitable porque ya no podía seguir agendando cosas para cuando él me pedía salir. Así que un día acepté y me junté con él. Llegué atrasada al encuentro y caminamos hasta llegar al bar al que él quería llevarme pero dio la casualidad de que estaba lleno así que sugerí ir a otro lugar. Llegamos y conversamos de nuestras vidas. Las típicas trivialidades como para generar conversa sin esos silencios incómodos. Pasó el rato y decidí que era hora de irme a mi casa; él me acompañó hasta el paradero de la micro y nos despedimos sin ningún atisbo de romance o algo así. Un saludo frío y apurado porque yo quería subirme luego a la micro. Pasaron los días y llegó un mensaje a mi celular en donde este ser se estaba declarando... Yo quedé muy WTF!! ni que le hubiese coqueteado o algo así. Lo mandé olímpicamente a la chucha, pero no se rindió porque insiste en ser mi amigo. Claramente a mi no me interesa su amistad, de hecho ese día conversando en el bar descubrí que no teníamos nada en común. Ni siquiera nos gustaba el mismo equipo de fútbol así que las cosas estaban más frías que raja de pingüino. Él me sigue hablando pese a que le dije que no me interesaba ni en lo más mínimo, y para alejarlo soy bastante seca y pesada para responder pero al parecer las indirectas y las directas no funcionan. No sé qué hacer para sacármelo de encima... No me da el tiempo para inventarle una chiva o pedirle a alguien que se haga pasar por mi pololo porque lo encuentro tonto, eso de inventar relaciones para escapar de gente persistente.

Me enteré también que ciertos engendros fueron padres. Ojalá esa criatura no tenga problemas con semejantes progenitores.

He comprado una infinidad de cosas de L'Arc en Ciel así que estoy esperando a que lleguen a mis manos luego para disfrutar como en los viejos tiempos.

No tengo ganas de narrar más cosas... Así que esto sería todo por el momento.



martes, marzo 26, 2013

Lolita Pornoestar*

Sapeando twitter caché que uno de los TT era la UAI y una mina llamada CotaRodríguez. La weá es que no entendía ni pelota así que me dediqué a leer la gran mayoría de los tweets, y finalmente di con un video en donde sale una pareja de zorroncitos follando al costado de una camioneta en plena fiesta de la universidad. Lo más chistoso es que cuando uno jura que la hace piola nunca faltan los ojos observadores. En este caso otros zorrones se avisparon y empezaron a grabar a la pareja en cuestión.
Lo que me causa más gracia es que la gran mayoría trata de maricones a los que grabaron y subieron el video. Yo no encuentro que sean maricones... Los weones no tienen culpa de haberse topado con ese espectáculo. Por último deberían haberse tapado con alguna weá pa pasar más piolas. Pero no, y pa peor la mina tenía un rebaje similar al que aparecía en Scary movie.
Cuál es el problema acá?? No van a ser los primeros ni los últimos en follar en lugares públicos. La mina si pensó en suicidarse, más weona es. Le pasó por tonta, porque pa más mala cuea, en este país a las minas se nos trata de maracas mientras que los hombres son machitos.

Cosas de la vida.

PD: Debería hacerme una brasileña por si me graban xD

miércoles, marzo 06, 2013

Summertime*


Como todos los veranos cada vez que vengo al Tabo, curiosamente duermo muy bien y tengo sueños muy bonitos aunque nunca los recuerdo, y si llego a hacerlo se me olvidan en un santiamén. No sé a que se deberá ni tampoco le intento buscar una explicación lógica porque en verdad dudo que encuentre algo que se relacione de forma más menos científica. A lo más podría pensar que mis sueños son bacanes por mi estado de relajo máximo y lo silencioso del ambiente.
La cuestión es que como todos los veranos, tuve un sueño muy vívido. Tanto que apenas me desperté lo escribí en un block para que no se me olvidara.
Sueño de verano, 16 de febrero.
Iba a un carrete en el que no conocía a nadie. Era en una casa gigantesca, super peloláis, en la que habían dos minos que según yo eran gays. Uno me resultaba familiar porque lo había visto en la tele (Sebastián Layseca), y el otro era guapo… Pero ni tanto al final. La cosa es que este último era bastante desagradable y nos echaba del carrete, pero el de la tele decía que no hiciéramos caso y que nos escondiéramos en la casa. Mi acompañante no recuerdo muy bien quien era, pero era alguien perteneciente a mi círculo cercano. Esa persona se fue con el mino de la tele y yo me quedaba sola en el centro del salón y no cachaba bien hacia dónde tenía que ir, hasta que escuché unos pasos que se aproximaban y divisé unos ventanales cubiertos por unas cortinas que llegaban hasta el piso. Me escondí detrás de ellas con la tincada de que la había hecho de oro y que pasaba piola, pero me equivoqué… Me pilló una anciana coreana (al parecer debo dejar de ver doramas porque influencian hasta mis sueños xD) que me tomaba del brazo y comenzaba a interrogarme hasta que llegaba nuevamente el gay de la tele y me llevaba hasta una pieza que estaba super desordenada y me explicaba que la señora coreana era la “abuela” del otro tipo y que odiaba a toda persona que se acercara a su nieto temiendo que todo el mundo se juntaba con él sólo con afanes de estafarlo (doramamodeon*).
Me recosté sobre unos cojines que habían en el suelo y me quedé dormida, hasta que apareció el señor desagradable, despertándome y preguntando por qué seguía ahí, si me había echado de la casa hace tanto rato. Ahí le digo que el otro gay dijo que podía quedarme y además que se había ido con mi acompañante por ende tenía que esperar para poder salir de ahí. Don desagradable se acuesta y comienza a dormir; yo me quedaba ahí hasta que despertó nuevamente y le pregunté su nombre. Me dijo que se llamaba “Eduardo” y que todo lo que tenía y que veía ahí le pertenecía a su “abuela”. A mi en realidad me daba igual eso porque no quería nada además que ya era hora de que me fuera a mi casa. Él responde que sí, debía largarme porque yo era una persona demasiado rasca para permanecer más tiempo ahí. Fue en ese momento en que me piqué y salí; aunque había un problema, porque una vez afuera de la casa noté que había nieve por todos lados y no tenía idea hacia dónde tenía que caminar para encontrar la salida. Opté por caminar en línea recta y después de un rato me topé con una manada de lobos. LOBOS! Traté de devolverme pero uno de los lobos comenzó a seguirme y aceleré el paso, pero mientras más rápido avanzaba, más se reducía la distancia entre el lobo y yo. Finalmente me alcanzó y cuando según yo no había nada más que hacer… Apareció “Eduardo”, que espantó al lobo y me salvó. Me levanté molesta porque no había pedido su ayuda y le exigí que me indicara como salir de aquel lugar…
Laguna mental. No recuerdo con mucha exactitud lo que vino en esta parte así que no lo relataré.
Estábamos en un boliche super láis, en donde me encuentro con los papás de la Vale tomándose un traguito. En el intertanto yo me dedicaba a buscar un lugar para todos. Me encontré con la Rosario (amiga del Nico de la PUC) y me increpaba por maraca, mala clase y miles de otros apelativos que no tomé en cuenta porque me preocupaba más encontrar un lugar para sentarnos. La cosa es que finalmente logré dar con un lugar para que nos instaláramos dentro del bar. Justo cuando voy a poner mis cosas sobre la mesa aparece “Eduardo” y se sienta. Le digo que yo llegué primero y me siento frente a él. Se ríe de mi y me dice que puede sentarse donde le de la regalada gana porque es el dueño del lugar. En eso que estamos discutiendo, llegan los demás junto con la Rosario y el Nico de la Cato. Me quedé perpleja porque el Nico se sentó al lado mío y comenzó con su actitud cargante de siempre. Noté que “Eduardo” se molestaba un poco con eso y ahí se fija bien en Nicolás. Resulta que se conocían desde chicos porque habían sido compañeros de colegio. En eso llegan Padilla, su pololo y un amigo del pololo que me querían presentar, que viene del norte y es PDI. Este tipo tenía un aspecto de hippie con unos tatuajes que me recordaban la Isla de Pascua. Lo saludo, mientras Nicolás y “Eduardo” casi lo liquidan con la mirada. Como no me importó, me puse a conversar con este nuevo personaje, y pasado un rato decidí que era hora de irme, a lo que el amigo de Padilla dice que me acompañará porque tenemos que follar. FOLLAR… Ahí quedó la pura cagá porque me bajó la rabia y mandé todo a la cresta, dejando a todos botados en el local (incluyendo mis cosas). Caminé por una calle que me era muy familiar, se parecía mucho a la subida para llegar a la casa de mi abuela Lola, pero había bosque a ambos lados. Me percaté que no tenía mi celular y que lo había dejado tirado en el bar, así que resolví devolverme para recuperarlo. La gente seguía ahí perpleja, a lo que entro y tomo mis cosas. En eso “Eduardo” se ofrece a llevarme pero rechazo su propuesta y me voy.
Estábamos en la roca sentados mientras las tías guardaban bolsos en unas camionetas porque habían decidido ir al coipo grande con los niños. Mi mamá me pregunta si yo quiero ir también, pero no estoy muy segura así que decliné su oferta. Ahí me dice que falta que llegue otra camioneta, en donde venía Ramiro y alguien más. En eso aparece otra camioneta, en la que venía “Eduardo”. La Victoria (mi prima chica) apenas lo ve, se baja corriendo de la roca y se va con él. Después de mucho rato vuelve a aparecer y me llama. Me acerco a él, y me dice que debo acompañarlo porque tiene algo que decir y es urgente. Me subo a la camioneta y nos vamos a un lugar muy bonito, en donde hay muchos árboles y pasto. Al centro había una cabaña e indica que debemos entrar ahí. Una vez en el interior de la cabaña, comienza a disculparse por haber sido tan desagradable las veces anteriores, aclaró también que no era gay y que el mino de la tele tampoco lo era. En eso que iba a interrumpirlo, me muestra una pantalla en la que se veían fotos de la Victoria en pelota, llena de marcas y rayados. Ahí me explica que la Victoria se le había insinuado pero que no le hizo nada porque en verdad a él le gustaba otra persona. Fue en ese momento, en            que lo miré detenidamente y me dice que yo era la persona que estaba buscando desde hace tiempo, y que se había dado cuenta cuando vio al Nico de la Cato joteándome en el bar, porque nunca había sentido una rabia tan grande como para querer golpearlo sin razón. Tomé aire y finalmente acepté que a mi también me gustaba mucho, pero que nunca iba a tolerar que me menospreciaran, menos alguien que ni siquiera conozco…
Me besó de una forma tan intensa, que en un momento llegué a pensar que me asfixiaba, pero continuamos hasta que nos lanzamos a una cama que había y nos echamos un polvo de aquellos. Aquí me levanté porque me dieron ganas de ir al baño…
Me sentía muy feliz y muy en paz… Todo había tenido un final “feliz”.
Aunque duró hasta que mi mamá vino a despertarme y me cagó el resto del sueño y por más que me concentré no pude terminarlo la noche siguiente.